RECORDAMOS A FRANCISCO OLAZAR A 54 AÑOS DE SU FALLECIMIENTO

"LOS CLUBES  Y LOS HINCHAS QUE NO RECUERDAN A SUS ÍDOLOS ESTÁN DESTINADOS A DESAPARECER" 
Dante Panzeri


Francisco Olazar, un centro medio histórico, comenzó jugando en la cuarta de Racing en 1909 y se consolidó rápidamente en la división superior. Nació el 10 de julio de 1885.


Lo distinguieron su empuje y su criterio para distribuir la pelota. Era un excelente cabeceador y le pegaba fuerte desde media distancia, así llegó a la selección, de la que sería entrenador en el Campeonato Sudamericano de 1929 donde resultó Campeón y, en el mundial que se disputó en Uruguay en 1930 donde Argentina pudo ser Campeón, perdiendo la final con el equipo local.

El rubio centrocampista de Racing, varias veces campeón en el amateurismo, Francisco Olázar, tiene el registro del primer DT de la selección nacional en la antesala del profesionalismo.

Dirigió a la selección de Argentina en 11 oportunidades entre 1929 y 1930, 

Los dirigentes argentinos premiaron a Olázar por su trayectoria como futbolista, dándole la dirección técnica de la Selección argentina.

Fue un técnico casi honorífico pues en aquel mundial los dirigentes seleccionaron a los jugadores y armaban la alineación.

Falleció el 21 de Septiembre de de 1958 en Lomas de Zamora. Para nosotros los racinguistas es un símbolo.

Diecisiete años tenía cuando se consolidó como titular indiscutido de la primera de RACING, asombrando al público porque parecía mucho mayor por su aplomo y su personalidad.
El Racing de Francisco Olazar, Alberto Ohaco y Juan Perinetti, "La Academia", fue el primer equipo siete veces campeón de modo consecutivo y también sigue discriminado. 

Hay crónicas y estadísticas que comienzan a remediar el olvido, por supuesto, pero la mayor parte de los informes podrían hacer creer que el fútbol en la Argentina comenzó en 1931, con el inicio del profesionalismo.

El Racing campeón que vino luego nos resultó, acaso, más familiar. El fútbol había ganado la calle. Dejaba de ser patrimonio de las escuelas y de los clubes de élite de los británicos en Buenos Aires. Además, el fútbol de "la Academia" comenzó a delinear un juego distinto, más técnico y vistoso. Pero los Olazar y Perinetti de Racing, hijos de la nueva inmigración italiana y española, fueron tan campeones argentinos como los anglófilos hermanos Brown.

Algunos episodios son inimaginables a ojos de hoy. Igual, quizá, que verían los antiguos hinchas estos campeonatos actuales de sólo 19 fechas, entre clubes de ingresos cada vez más desiguales, con árbitros cada vez más sospechados y con algunas barras bravas que hasta obligan a sus equipos a perder.
Don Francisco ya mayor pero con la misma prestancia
Cada campeonato fue hijo de su tiempo. Pero tuvo equipos, jugadores, árbitro y público. ¿Sólo porque no había dinero de por medio debemos seguir discriminando, entonces, a los grandes campeones de la era amateur?

Dice Jorge Iwanczuk en la introducción de su formidable libro Historia del fútbol amateur de la Argentina. "¿Por qué si antes llenaron estadios con 40.000 espectadores y fueron grandes Racing, Boca, Los Amargos, San Lorenzo, Huracán, River..., y hasta hubo un campeonato mundial en el que salimos subcampeones con jugadores amateurs, empezar a contar la historia desde la mitad?

Admiro a los pioneros? Disfruté descubriendo cómo de las barriadas populares, en los baldíos, iban surgiendo los clubes, se definían las camisetas y este juego fascinante convocaba voluntades amasando pasiones. Para reivindicar esos nombres, esas fechas memorables y legendarias y, sobre todo, para llenar ese vacío de información que tiende un velo de omisión sobre este pasado apasionante, escribí esta nota."


Juan Antonio Fornasier

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