Saja (6,5): Tuvo atajadas importantes en ambos tiempos. Le ahogó
varias situaciones de gol a Silva, como los dos mano a mano. Quizás una salida
levemente apresurada en el primer gol. Sin embargo, si no hubiese sido por él,
el resultado pudo haber sido mayor. Como en varios partidos del semestre
pasado, terminó siendo victima de su defensa.
Martínez
(4): Central tirado
a lateral. No siente la posición. Le cuesta, por su falta de dotes técnicos,
aportar salida y, además, tiende a cerrar mucho la cancha en ocasiones que no
lo ameritan. El segundo tiempo sufrió, y mucho, el tándem Clemente-Sanchez
Miño.
Ortíz
(4,5): Dejó que Silva
reciba la pelota de espaldas al arco durante gran parte del partido. Le faltó
más presión durante el delantero rival. Su fortaleza aérea en ataque no pudo
hacerla valer, fue bien controlado por Schiavi.
Cahais
(4,5): También padeció
a Silva y a Viatri, sobretodo a este último, que fue gran generador de juego en
Boca. A favor: mostró seguridad en el juego por arriba ante pelotazos cruzados.
Corvalán
(5): Tuvo un mal
retroceso en defensa en el primer gol del rival y, como si eso fuera poco, el
pelotazo que, pese a su altura, parecía ser controlado por Diego Villar, fue
desviado por él a Silva. Fue de los más firmes en defensa. Aportó salida y pasó
varias veces al ataque, aunque fue buscado muy poco por sus compañeros.
Villar (6): Aceptable partido. Mejor primer tiempo que segundo.
Aportó sacrificio en el ida y vuelta. Fue generador de juego por su sector y tuvo
buenas intervenciones colectivas con Viola en la primera etapa. En el segundo,
quizás, le pesó el cansancio. A mejorar: debe hacerse más dueño de la pelota en
el medio.
Pelletieri
(6,5): Fue el
equilibrio en mitad de cancha. Recuperó bastante y bien, sin falta. Buenos
cortes de jugadas a los costados. Tiempista. Repartió juego en el medio. Jugó
como se deben jugar la finales.
Camoranesi
(4,5): El primer
tiempo pasó muy inadvertido. No lograba cortar avances y la pelota estuvo muy
poco en sus pies. En el segundo generó más fútbol. Zubeldía lo mató cuando sacó
a Pelletieri y lo dejó a él como encargado de la marca en el medio, ahi fue
cuando Boca tuvo más espacios.
Centurión
(5,5): Aceptable
partido. Rápido y encarador. En el primer tiempo se tiró mucho por la derecha
y, quizás, le faltó experiencia para entender que el punto débil de la defensa
de Boca era por su sector con Franco Sosa. Sin embargo fue de los más
desequilibrantes de Racing en ataque, sobre todo en el segundo tiempo cuando
encaró más al mencionado ex Racing. A mejorar: por momentos peca de
individualista.
Viola (7): Sin dudas el mejor de Racing, por eso ya fue vendido
a Europa. Fue desequilibrante con su gambeta en la primera etapa, donde fue un
demonio para Clemente Rodríguez. Tuvo buenas combinaciones con Villar. Asistió
a Sand en una muy clara. Tuvo en el gol su premio al esfuerzo. Lo más
importante: es destacable su gran deseo de jugar este partido pese a que ya no
pertence al club. Sin duda, se lo extrañará.
Sand (3,5): Muy mala noche. Sigue con el arco cerrado. Tuvo tres.
Primero, tras un gran centro de Viola, de volea la mandó por arriba del
travesaño. Minutos más tarde, mano a mano con Ustari, se durmió y Schiavi la
envió al córner. Y en la segunda etapa, con pelota dominada dentro del área,
también se le comieron por lentitud. Además, fue anulado por Schiavi en todo
momento.
Fariña
(4,5): Entró para
aportar fútbol, pero a excepción de alguna jugada en velocidad, no hizo mucho.
Perdió dos pelotas que casi terminan en gol en contra.
Cámpora
(-): Con su ingreso
Zubeldía tuvo la intención de colocar más gente en el área rival. No tuvo
chances.
Hauche (-): Misma intención que con Cámpora. Tampoco le dió
resultados.
Matias Lasa
Matias Lasa
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